19 nov 2007

The Rapture y el rollo de un concierto

El otro día fui a The Rapture. O sea, fui a EL concierto que pasó por alto la tónica de este fin de año. Porque entre tanto vejestorio re-unido, hacía falta algo más fresco. Y no es que Travis, Bjork o Chemical Brothers sean muy viejos, pero está claro que sus años mozos pasaron hace rato. Okei, The Killers son de ahora, pero el concierto no ofreció esa cuota de “no tan popular” que The Rapture tiene. Lo bueno del de The Rapture, es que prometía ser divertido. Y lo fue.

El Teatro Caupolicán se convirtió, por un rato, en una disco de Nueva York. El público (poquísimo y, a ratos, bien prendido) ofreciendo las tendencias de la moda neoyorquina, y los DJs, pero no de tornamesas, sino de bajo, batería, guitarra y saxo, poniéndole música a la fiesta. Porque The Rapture es una banda que hace bailar. Por algo son lideres del dance punk, que de hecho es más dance que punk. Pero como (casi) toda banda que se inició como hype, no les gustan las etiquetas.

El concierto (o fiesta) estuvo buenísimo. Sonó excelente. Ya los rasgueos del roadie antes que entrara la banda anunciaban que esto se iba a poner bueno. Matt Safer y Luke Jenner, no sé cómo, alcanzaron los tonos agudísimos de sus canciones sin ningún problema. La entrega de los locos en el escenario fue, yo creo, la misma que cuando tocan en Nueva York y el bis no bajó las revoluciones del show. Eso sí, hubo descoordinación en algunos tiempos, pero eso ya es hilar fino.

Ahora, te preguntarás supuesto lector, por qué en el título aparece “el rollo de un concierto”. Lo que pasa, es que por esas cosas de la vida, terminé solo en platea baja. Lo malo, es que a ratos me aburría. Lo bueno, es que cuando terminó me di cuenta de lo raro que es ir al concierto de una banda que te vuela la cabeza. Porque como arriba había poca gente, no tenía la presión del público de disfrutarlo porque sí. Lo disfruté igual, pero lo distinto fue que estaba yo, solo, mirando a The Rapture. Por eso como a la tercera canción me pregunté si lo estaba pasando bien y después me dije que cómo no lo iba a estar pasando bien, si era The Rapture y estar ahí me costó dinero y tiempo. No tenía excusa, era un concierto excelente. Pero por más genial que haya sido, escuchaba y bailaba las mismas canciones que escucho y bailo desde hace un tiempo y veía a los mismos tipos que veo en los videos en vivo de la banda. La “gran cosa” es que de verdad estaban ahí, en tres dimensiones. Ya al borde de una catarsis, resolví mi cuestionario en un “filo, hay que verlo igual nomás”.

En esa idea, media obligada, me quedé y así logré disfrutarlo. Al final se me dibujó una sonrisa en la cara, que me duró hasta el día siguiente. También me di cuenta que una de las cosas que más me gustan de ir a un buen concierto es contar lo que pasó. Porque ahora puedo decir que yo también estuve ahí y lo pasé la raja y escuché el “hueones y hueoncitas” de Safer (bajo y voz) y vi a Luke (guitarra y voz) tirarse al público que casi lo mató y su irónico “¿quieren más The Ganjas (teloneros)?” y el baile freak de Andruzzi (saxo y cencerro) y su onda y todo.

Terminó el concierto y el público abandonó el Caupolicán con cara de haber ido a una gran fiesta y con todas las ganas de seguir carreteando. Yo me fui para mi casa, prendí el computador y antes de dormir escuché un par de temas de The Rapture. Era tanto como estar en vivo.

"Down For So Long" dando inicio a la fiesta

4 comentarios:

Unknown dijo...

Yo no fue a The Rapture.

Pero fui a Bjork.

Anónimo dijo...

wn q wena esa wa de ir a ver un concierto de un grupo que te gusta mas q la csm ,,,caxa que yo esperaba ver a calamaro hace 9 , 10 años atras , wn , es la volaa mas loca del mundo , despertarte y acordarte que dentro e tres semanas vas a ir a una wa que estabas esperando por años... ir a una wa asi , un concierto de rock , de uno de los mas grandes musicos argentinos.....toos los dias me imagino las canciones que vaa tocar , o al wn entrando al escenario y queando la cagaa en el publico ,,,,

esa wa se lo voy a contar por años a las personas con las que converse ,, hasta a los salmones


aaaaa y los mejor ....SECTOR TOP VIP..PA QUE MA

Anónimo dijo...

Yo creo que los mejores conciertos que he ido son aquellos donde no me hago tanta expectativa. Este fue uno de ellos. Ok, claro que me suponía un show prendido, pero tampoco soy TAN fanático de The Rapture, quizás por eso me relajé y me lo bailé todo. Muy buen lugar el Caupolicán, no se si tanto por el sonido, más por la arquitectura y la onda. Buen comentario

joaquin urrutia dijo...

Te envidio
Espero ir a Bob Dylan si se confirma

Feliz año
Saludos